domingo, 29 de septiembre de 2024

 

 

LA PERCUSION

 

Desde el principio de los tiempos el ser humano ha golpeado, raspado, sacudido o entrechocado elementos que se encontraban en la naturaleza que les acompañaban en sus quehaceres diarios o, incluso, en momentos mágicos, relacionados con la caza, juegos o rituales religiosos. Las formas coincidían con las formas de la naturaleza: sacudidores en forma de semillas, raspadores en forma de ramas, tambores con forma de tronco, conchas…. Con la aparición de las herramientas, parece ser que las formas de los instrumentos variaron para hacerlos más manejables.

La percusión se distingue por la variedad de timbres que es capaz de producir y por su facilidad de adaptación con otros instrumentos musicales. Cabe destacar que puede obtenerse una gran variedad de sonidos según las baquetas o mazos que se usen para golpear algunos de los instrumentos de percusión.

 

INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN.

Los instrumentos de percusión son un tipo de instrumento musical cuyo sonido se origina al ser golpeado, agitado o frotado. Son los primeros elementos sonoros que creó el hombre, en su trabajo diario y en sus diferentes fiestas, para producir sonidos y ritmos. Su origen se remonta a las primitivas sociedades africanas y asiáticas, marcado por su papel mágico y su acentuada función social. Instrumentos de percusión se han utilizado desde la prehistoria. Un instrumento de percusión puede ser usado para crear patrones de ritmos (batería, por ejemplo) o bien para emitir notas musicales (xilófono, por ejemplo). Suele acompañar a otros con el fin de crear y mantener el ritmo. Pero también puede ser instrumento solista o formar orquestas.

Desde antiguo, los instrumentos más ancestrales y primarios fueron los de percusión, y más concretamente los de entrechoque e idiófonos que son los constituidos por materiales naturalmente sonoros, y que no necesitan de tensiones adicionales para producir sonidos.

Cuatro mil años antes de Cristo, los sumerios ya utilizaban en Mesopotamia asiática  la lira, el arpa, determinados tipos de laúd primitivo, trompetas rectas y un buen número de instrumentos de percusión (tambores y timbales, entre otros), todos ellos profusamente adornados, en ocasiones con metales preciosos.

 

 Clasificación

.

Los instrumentos de percusión pueden clasificase en dos categorías según la afinación:

De afinación definida: Son aquellos que producen notas identificables. Es decir, aquellos cuya altura de sonido está determinada.
Algunos son: el timbal, el xilófono, el vibráfono, la campana, los crótalos, la celesta, la campana tubular, los tambores metálicos de Trinidad.

De afinación no definida: Son aquellos cuyas notas no son identificables, es decir producen notas de una altura indeterminada. Entre ellos: el bombo, la caja, el afuche, las castañuelas, las claves, el cencerro, el címbalo, el güiro, el trinquete, la zambomba, el vibraslap.

No obstante, esta clasificación no es estricta, por ejemplo, algunos percusionistas son capaces de afinar las cabezas de tambor a tonos específicos. En las orquestas se suele diferenciar entre:

Percusión de membranas
Percusión de láminas
Pequeña percusión

Según otro criterio, se pueden clasificar en tres categorías que son: Membranófonos: que añaden timbre al sonido del golpe.
Idiófonos, que suenan por sí mismos, como el triángulo.
Placófonos: placas metálicas que entrechocan.


 Esta clasificación tampoco es estricta, por ejemplo, la pandereta es un membranófono y un idiófono porque tiene ambos: la piel y los cascabeles.

 

EL TAMBOR.

 

La historia nos dice que el hombre primitivo tiene su origen en la región de África, y es natural pensar que aquí también nace el primer tambor. Podemos imaginar al primer homínido chocar un palo en algún objeto hueco como un tronco de madera, una piedra resonante o un cráneo de algún animal. Los primeros tambores consistían en piezas de piel de reptiles estirados sobre troncos de árboles huecos y eran golpeados con las manos. Algo más tarde, las pieles de mamíferos salvajes o domesticados se utilizaron para hacer tambores más grandes que se golpeaban con palos. Además de los troncos de los árboles, las pieles también se estiraban sobre fosas excavadas en el suelo para hacer tambores grandes o sobre aberturas en macetas o calabazas para hacer tambores pequeños. Se han encontrado restos de tambores primigenios en África y Egipto  pero también se han encontrado tambores de esta índole en el mundo entero. Pareciera que cada tribu, pueblo y nación tuviera la misma concepción de un instrumento de percusión, construido más o menos con las mismas características. 

Los tambores más antiguos que se han hallado son de madera hueca, de barro y de cerámica, con parches de piel atados con cuerdas y sujetados con pequeños clavos de madera. Estos tambores también tenían orejas o agarraderas para sujetarlos mejor. La piel de solía ser aleatoria, tanto de cabra, res e incluso se han encontrado tambores que estaban hechos de piel humana. 

El tambor en un principio se consideraba un instrumento sagrado que transportaba al mundo de los muertos, al mundo astral en donde se podía entrar en contacto  con los antepasados y con Dios. Aunque al paso del tiempo se fue usando para la guerra, para las fiestas y también para acompañar el trabajo pesado. 

Se hacían los tambores con piel de buey pero más comúnmente de la de asno. El tambor consistía en un círculo de madera o de metal cubierto de una piel lo que daba la figura de una criba. Se tocaba algunas veces con baquetas o con el tirso, pero lo más común era con la mano, del mismo modo como se toca el pandero, al cual se parecía muchísimo en tiempos antiguos. Ponían en él unas planchas de metal y también campanillas y cascabeles para producir un sonido más estrepitoso.

Los moros fueron los primeros que usaron en los ejércitos estos instrumentos que ellos llamaban At-tabal. Las túmbalas, instrumento propio de la antigua caballería y conservado aún en algunos lugares de Cataluña en las fiestas populares, es igualmente invención árabe.

Es indudable que los españoles adoptaron el tambor tomándolo de los árabes ya en la Edad Media. Algunos historiadores suponen que los chinos hacen uso del tambor desde tiempo inmemorial. Instrumento parecido al tambor también aparece muchos pueblos de África.

Los hebreos, y otros pueblos del entorno, usaban tambores pequeños llamados tophde los que derivó el adufe o pandero. Los timbales mayores fueron empleados por los árabes como arma bélica: los hacían sonar desde lejos para anunciar su llegada, con lo que buscaban intimidar al enemigo y adentrarles en el cuerpo el temor y la congoja.

 

Este instrumento, llamado por los griegos tympanon o typanon,  tympanum por los romanos también recibió el nombre de caja de guerra.  Los griegos acompañaban  sus cantos con el tympanonuna piel estirada sobre cuenco de madera de boca ancha equivalente a un timbal chico con el que celebraban a su ritmo,  las fiestas para honrar a Dionisos, dios del vino.

Entre los griegos se creía que los frigios fueron los inventores del tambor al paso que los romanos pensaban que habían sido los sirios. Lo más probable parece ser que los griegos tomaran el uso de los tambores de los asiáticos y que de ellos pasara a los romanos.

 

Los romanos emplearon este instrumento para las marchas militares y para marcar el paso, aunque en el fondo lo tenían por instrumento bárbaro.

A Europa llegaron traídos por los cruzados y se usaron aquí con el concurso de trompas y trompetas en las fanfarrias y ceremonias y en los hechos de armas. .En el siglo XV no hubo ejército que no contara con un cuerpo de tambores y timbales; y en el siglo XVII se incorporaron estos instrumentos a las orquestas barrocas.

 

Los tambores de marco fueron utilizados por las antiguas civilizaciones de Oriente Medio hace unos 5.000 años. Posteriormente fueron adaptadas por los antiguos griegos y romanos. Los romanos también utilizaban tambores tubulares con pieles estiradas en ambos extremos de una cáscara hueca. Después de la caída de Roma, los tambores no eran de uso común en Europa Occidental, aunque continuaron siendo utilizados por los árabes. Las Cruzadas pusieron a los europeos en contacto con la cultura árabe.

De los árabes, los europeos adaptaron la pandereta (un pequeño tambor de marco), el naker (un pequeño timbal) y el tabor (un pequeño tambor tubular). El tabor se usaba a menudo con una trampa, que consistía en finas cuerdas de tripas de animales estiradas a través de una de las cabezas para producir un sonido de cascabeleo. El tabor enrejado es el antepasado del tambor enrejado moderno.

Los grandes timbales, utilizados durante mucho tiempo en Oriente Medio, se introdujeron en Europa Occidental en el siglo XV. Estos instrumentos consistían en piel de becerro extendida sobre grandes calderos de cobre y se utilizaban con fines militares y ceremoniales. Se utilizaron por primera vez en orquestas a finales del siglo XVII.

El desarrollo del tambor.

 

Hacia el 3500ac., se menciona el tambor en una leyenda china; allí y entonces ya se fabricaba este instrumento de percusión muy parecido a como se hace hoy: pieles tensadas sobre un armazón de madera, y a menudo también aprovechando vasijas o tinajones.

 

Un tambor es un instrumento de percusión de sonido indeterminado, perteneciente a la familia de los membranófonos según el sistema de clasificación de Hornbostel-Sachs. Consta de una caja de resonancia, que suele ser de forma cilíndrica, y una membrana llamada parche, que cubre la abertura de la caja. Se fabrica de forma artesanal, los materiales principales son la madera y la piel de baifo (cabra). Otra parte muy importante es la soga y la plancha de metal. Se pueden fabricar tambores de diferentes medidas, desde pequeños para niños, hasta de grandes volúmenes y unos 12 kg de peso. Existen gran variedad de tambores en el mundo, cada nación ha creado el suyo de acuerdo al sentir que se desea transmitir

 

En resumen, el origen del tambor es Africano, y se remonta a la prehistoria.

 El tambor llega a Europa a través de las migraciones de africanos y moros a Europa. Posteriormente, el tambor también penetra en el Nuevo Mundo, cuando los ejércitos conquistadores inician la colonización americana. Cuando los africanos esclavizados llegan a América, exploran diversas posibilidades sonoras, convirtiendo casi cualquier objeto en tambor y en motivación para el baile. A falta de espacios y materiales aptos para construir y tocar sus tambores originales, construyen unos más pequeños. Tambores y bailes se van blanqueando gradualmente, es decir, adaptando a los salones y a las gentes, hasta conseguir la aceptación que tienen hoy en día en la sociedad.

 

EL BOMBO

 

El bombo, un gran tambor tubular, era raro en Europa hasta finales del siglo XVIII. El tambor con bordón y el tambor tenor (una versión algo más grande del tambor con bordón, pero sin el bordón) se utilizaron principalmente con fines militares hasta el siglo XIX.

Los timbales se convirtieron en una parte importante de la música orquestal durante el siglo XIX. Durante la década de 1880, se desarrollaron dispositivos que permitían a los timbales cambiar rápidamente el tono del instrumento.

Variedades

Los instrumentos de tipo tambor son los instrumentos de percusión más comunes. Algunos son:

 Bombo

 Bongó

 Djembe

• Caja

 Conga

 Darbuka

 Mazhar

 Tamboril

 Redoblante

 Taiko

 Timbal

 Tumbadora

 Tambor alegre

 Tambor llamador

 Tambora

 Caja vallenata

 Batería

OTROS INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN

Las Claves son dos palitos de madera que constituyen un instrumento idiófono de entrechoque, se tocan con las dos manos, y cumplen la función de guía rítmica en estilos como el son y la rumba cubana. La mano que sostiene hace de caja de resonancia.

El Chekeré es una calabaza a la que se le ha trenzado una red de cuentas de semillas de frutos y bolitas, y se toca sacudiéndolo de una mano a otra y, a la vez, percutiéndolo con la palma de la mano en su base; es típico de África y Cuba.
La Kalimba o samza consiste en una cajita de madera con unas varillas de metal atornilladas por medio de un fleje a la madera, y que al pulsarlas suena como un pequeño arpa (África).
La Cuica es un tamborcito metálico en cuyo parche hay un fino palito atado y que está situado hacia el interior del cuerpo del tambor (al contrario que la zambomba, que tiene el palito en el exterior). Produce un sonido muy gracioso como de risas o aullidos de mono y se consigue frotando la varilla con un trapito húmedo y practicando más o menos tensión en el parche. Su origen es el Kinfuiti africano.
El Berimbao es un instrumento de origen angolano que se difundió en Brasil; consiste en un arco con su cable tensado y en la parte inferior lleva instalada una calabaza, a modo de caja de resonancia y que se ajusta sobre la tensión del cable, permitiendo cambiar la afinación. Se toca con un palito, una piedra etc...
El Caxixi es un instrumento afro-brasilero, que está hecho con mimbre trenzado a modo de cestita, y que dentro contiene semillas; la base es de calabaza y contra ella chocan las semillas, produciendo un sonido agudo similar al del charles.
La Cabasa es una especie de rodamiento con aros de bolitas metálicas que al girar en la mano, y con un golpe de muñeca, producen un sonido de arrastre metálico. Es típica de Brasil y originariamente era de calabaza y red.
El Shaker es un tubo metálico con semillas, piedrecitas o perdigones, que se agita como una coctelera y produce un sonido fino de arrastre metálico. Muy usado en Samba.
El Flexatone es una lámina de metal flexible que lleva incorporadas dos bolitas de madera y que rebotan contra la lámina a la vez que el dedo pulgar tensa y afloja dicha lámina: produce un efecto metálico-elástico muy curioso. Todo ese sistema va instalado en un mango para poder ejecutar golpes de muñeca a la vez que presionamos con el pulgar.
El Sistro es una especie de sonaja formada por anillos colocados en un armazón de metal, con un mango para agitarla. También se ve de madera con anillos de calabaza (África).
El Güiro es un rascador estriado de madera o calabaza, que da un sonido “como de croar” al deslizar un palito por las estrías que lleva distribuidas a lo largo de su cuerpo. En Cuba también se conoce como “güiro” al Chekeré por estar hecho del mismo fruto (la Güira).
Los Temple-blocks, son un set de cajas chinas o “cocos” de madera afinados.
Las Timbaletas o Pailas son el resultado de la evolución de los timbales sinfónicos y su adaptación a la música popular en Cuba. También se les llama “cajas rumberas”.
Las Tumbadoras o Congas tienen como antepasados a los tambores Ngoma africanos, de origen congo o bantú. Son tambores unimembranófonos que han ido evolucionando con el paso del tiempo a toneles con el parche de cuero tachuelado y, más recientemente, se innova con un sistema de tensado por llaves. El nombre de este instrumento se ha mantenido hasta nuestros días por su origen congo o bantú.
Los Bongos son unos tambores más pequeños que van unidos de dos en dos, tradicionalmente se tocan agarrándolos con las piernas y en posición de sentado, aunque también pueden ir en un soporte para tocar de pie. Son el resultado de la adaptación de uno de los tambores abakuá y de las bocas agudas de los tambores batá (chachá), a la música popular cubana; de lo religioso a lo profano.
La Tabla india es un instrumento usado en la música clásica hindú, consistente en dos tambores que se tocan en el suelo, uno es metálico y redondeado como una olla (bayan), y da sonidos graves oscilantes en su registro según presionemos el parche con la palma de la mano; el otro tambor es de madera y cilindrico (däyan) y da los sonidos agudos y metálicos repiqueteando con los dedos. Son tambores unimembranófonos, cuyos parches son compuestos e incorporan unos círculos negros de textura diferente para proporcionar armónicos (esos círculos se hacen con pasta de arroz mezclada con óxido de manganeso). Su técnica es muy compleja y requiere mucho estudio.
El Djembé es un tambor muy conocido últimamente en España, su procedencia es africana y más concretamente Malinke y Mandinga (Guinea Conakry). Es un tambor unimembranófono en forma de copa, debido a la forma de la raíz del tronco de árbol que se usa para fabricarlo (la raíz se rebaja y ahueca para hacer la caja de resonancia). Su sonido es muy agudo en el borde del parche, pero golpeando con la palma en el centro se consigue un poderoso sonido grave. He mencionado a los Malinkes por ser la etnia que habla y se comunica con este instrumento.
Los Tambores Batá son tres tambores bimembranófonos de origen africano (yoruba) pero que han tenido pleno desarrollo en Cuba, donde se conservan toques que en África ya se han perdido. Cuando los Bataleros cubanos presentaron sus toques ante el rey de Nigeria, fue un momento de gran expectación, ya que quedó demostrado que la tradición seguía viva y el lenguaje de esos tambores era reconocido. Los tres tambores son, de mayor a menor, el Iyá, el Itótele, y el Okóncolo y se emplean en música religiosa, para culto a los Orishas.
Los Steells-drums (tambores de acero) son unos bidones de petróleo cortados a diferentes alturas y cuya base de acero se divide en sectores a golpe de martillo. Se afina cada sector con una nota musical, consiguiendo llegar a sonar con el mismo registro de notas que un teclado. Actualmente se ha llegado a tal perfección en la afinación que cuando se emplean en grabación, el que no los conoce piensa que son teclados. Para mí constituyen una prueba de la gran capacidad musical e ingenio de los músicos afro -caribeños de Trinidad y Tobago. Se tocan con mazas de caucho.
El Palo de lluvia es una caña de bambú en cuyo interior se ha construido un laberinto en espiral con palitos de bambú más finos y por el cual se desplazan piedrecitas, semillas y/o trocitos de cocha triturada, creando un sonido de caída de agua muy efectista, cuando lo inclinamos de un lado a otro. Se fabrica mucho en Méjico.
El Cajón Peruano es un instrumento adoptado en España por los músicos flamencos, pero su origen es afro-peruano. Ha tenido tanta difusión en España, que ya se habla de Cajón.

CONCLUSIONES

Si se atribuye a la palabra ruido el significado puramente físico de sonido con espectro amplio y continuo, puede afirmarse que el uso del ruido en la música es tan antiguo como la música misma. La observación de culturas musicalmente muy primitivas muestra que los sonidos percusivos son los que primero aparecen, marcando ritmos de diversa complejidad. Muchos ritos religiosos utilizan el sonido percusivo como acompañamiento, a veces para crear un clima de cierta alienación propicio para el adoctrinamiento. Algunos sostienen que el ritmo con una cadencia constante busca emular el ruido del corazón. También es posible que se intentara imitar el sonido de la marcha a pie. Aun en la tradición europea occidental, muchas músicas populares han incluido tambores y otros instrumentos de percusión desde muchos siglos atrás.

 

Bibliografia.

 

www.wikipedia.org

www.edu.xunta.gal

www.patrimoniointeligente.com

www.ipsomusica.com

www.edu.red.cu

www.globalpercusion.com

www.eumus.edu.uy

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Vistas de página en total

si pasas por este sitio, me gustaria saber tu opinión